Ante cualquier situación de emergencia es fundamental tener acceso a fuentes de agua cuanto antes. En este artículo hablaremos de las distintas estrategias y utensilios que podemos utilizar para asegurarnos tener agua potable a nuestra disposición:
- Fuentes de agua dentro de casa
- Fuentes de agua fuera de casa y su desinfección:
- Agua de lluvia, ríos, manantiales
- Desinfección por calor: hervir el agua
- Desinfección química
- Filtración: Lifestraw
Lo más importante es evitar cualquier fuente de agua que sea sospechosa de estar contaminada con productos químicos o combustibles. Si el agua tiene un color raro o un olor sospechoso, es mejor que busquemos otra fuente de agua. Una intoxicación por agua contaminada nos dejará fuera de combate muy rápidamente.
Fuentes de agua dentro de casa:
El agua del grifo en España es mayoritariamente potable, así que esta será nuestra primera fuente de agua. Evidentemente en caso de emergencia es posible que no haya suministro de agua, por lo que buscaremos alternativas:
- El agua acumulada en la cisterna (no en la taza del WC!), siempre que no haya sido tratada con productos de limpieza o perfumados.
- El agua acumulada en el termo: estos termos suelen acumular 60-100L de agua de la red de suministro, así que puede ser una buena fuente de agua potable. Si tienes calefacción por agua caliente, no utilices el agua de los radiadores, utiliza sólo el termo que está conectado a los grifos.
- Hielo del congelador: Si el hielo está hecho con agua potable podremos descongelarlo y consumir el agua líquida.
- Agua embotellada: La solución obvia, tener siempre en casa unos cuantos litros de agua embotellada. El agua embotellada no tiene una fecha de caducidad siempre que se conserve en un lugar fresco y seco, alejada del sol.
Fuentes de agua fuera de casa:
Si ninguno de los suministros de casa está disponible, o si la situación de emergencia te pilla lejos de la civilización, hay otras fuentes de agua que tendremos a nuestra disposición:
- Agua de lluvia.
- Agua de arroyos, ríos o lagos.
- Manantiales naturales
Ante cualquier sospecha de que el agua puede estar contaminada por sustancias químicas tóxicas, busca otra fuente de agua. Si tiene apariencia turbia intenta hacer una primera filtración a través de un paño o un filtro de café.
Además, cualquiera de estas fuentes podría estar contaminada por microorganismos perjudiciales, así que lo más seguro es desinfectar el agua antes de consumirla. Para ello contamos con tres técnicas:
- Desinfección por calor: hervir el agua
Hervir el agua es el método más efectivo para eliminar bacterias, parásitos e incluso virus. Para estar seguros, el agua debe hervir a fuego fuerte durante al menos un minuto. Esta técnica es la más compleja ya que necesitaremos un recipiente para hervir el agua, y tendremos que poder encender un fuego.
En este otro post os explicamos las distintas formas de encender un fuego en una situación de emergencia. Si estás planeando una aventura, móntate un set como este con un hornillo, cartuchos de gas y una taza de titanio que puedas poner al fuego directo.
- Desinfección química
Otra forma de eliminar los gérmenes del agua es utilizando la desinfección química. Este método consiste en añadir al agua unas pastillas, o una dosis determinada de un líquido desinfectante, y dejar que elimine los gérmenes. Éstas son soluciones comerciales, así que sigue siempre las instrucciones del fabricante.
Habitualmente contienen hipoclorito sódico (lejía). Esto significa que en teoría también podríamos utilizar lejía de desinfección para potabilizar el agua, aunque es menos recomendable porque es más fácil cometer un error y ponernos en peligro. Si haces esto asegúrate de utilizar lejía de desinfección, que no contenga detergentes.
Esta web de Acnur nos indica que con sólo 6 gotas de lejía podremos potabilizar 2 litros de agua (asumiendo que la lejía comercial contiene 20g/L de cloro). Aplicaremos esta cantidad y dejaremos reposar el agua 30 minutos antes de utilizarla.
- Filtración: Lifestraw
Lifestraw es una marca comercial que desarrolló un filtro de agua portátil. Al succionar por un extremo forzamos al agua a pasar por el filtro. En las distintas etapas del filtro se retendrán partículas, pero también microorganismos de hasta 0,2 micras de tamaño. Con esto eliminaremos el 99.9999% de las bacterias y el 99.9% de los parásitos protozoarios.
Dado el compacto tamaño y el hecho de que no requiere consumibles, ésta es una buena herramienta para llevar con nosotros en las aventuras por la naturaleza. Un cartucho puede filtrar hasta 4.000 L de agua. A lo largo del tiempo, según se vaya agotando su capacidad de filtración, Lifestraw disminuirá la cantidad de agua que puede fluir a través de ella. De esta forma nunca beberemos agua no filtrada, simplemente dejará de funcionar y sabremos que en ese momento necesitamos reponerla. Ésta es la solución que recomendamos al construir tu mochila de supervivencia básica.
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